Leyendo "Cartas morales a Lucilio" de Seneca, he encontrado unas reflexiones, sobre el título de esta entrada, que me han impactado, por ello, las reproduzco a continuación.
Carta LXXXIV
" No debemos ni escribir solamente, ni leer tan sólo; lo primero disipará y agotará las fuerzas;me refiero a la composición; lo otro las disuelve y debilita. Se ha de pasar alternativamente de lo uno a la otro y atemperar lo uno con lo otro, para que la composición dé estructura a cuanto se ha recogido en la lectura.
Como dicen, debemos imitar a las abejas,que vuelan errantes y escogen las flores idóneas para hacer la miel, y luego cuanto trajeron lo disponen y distribuyen por los panales y, como nuestro Virgilio dice:"la fluida miel condensan y llenan por completo sus celdillas con el dulce néctar."
Quiero que así sea nuestra alma: que existan en ella muchas artes, muchos preceptos, ejemplos de muchas edades, pero que todo tienda a una unidad."
En la misma linea decía Sophenhauer:" Quién lee mucho denodadamente, no ejercita su pensamiento, sino que asimila el de otro. Es necesario, además de leer, pensar y reflexionar uno mismo,para por su propio camino, llegar a sus propias conclusiones."
No hay comentarios:
Publicar un comentario